Tómate tu tiempo para degustar el té
Disfrutar de un buen té es parecido a degustar un buen vino. Con el tiempo puedes desarrollar tu paladar y aprender a apreciar los matices aromáticos y las propiedades de un té de calidad como lo es indiscutiblemente el reconocido té Ceilán de Sri Lanka. El primer paso es observar el té seco. Generalmente los que tienen hojas completas suelen ser mejores que los de hojas muy trituradas y la frescura está indicada por un aspecto lustroso.
El siguiente paso es experimentar con diversas técnicas de infusión. El aspecto ritual del té es tan importante como consumirlo. Prueba con distintos tiempos y temperaturas, varios tipos de agua y proporciones de agua-té. Otórgate tiempo, aprovecha este momento para hacer un paréntesis en tu día, convirtiéndote en el propio productor de tu té favorito y contempla mientras pasa el tiempo del infusión. Una vez listo el té observa su color y su opacidad, para lo cual debes verterlo en una taza blanca o transparente. No es una regla absoluta, pero la mayoría de las veces los colores oscuros son propios de sabores más fuertes. En este paso también puedes observar cómo las hojas se han abierto y si en la mezcla había otros ingredientes que con el agua se han expandido.
Antes de probarlo, te queda otra cosa por hacer: apreciar su aroma. Inspira el vapor que sube de la taza y trata de recordarlo para conectarlo con el sabor que entrará por tu boca. Ahora estás listo para disfrutarlo al máximo con tu paladar! Un té tan exquisito como el de Sri Lanka de seguro merece toda esta atención.
